El principio de la economía circular es aquel que establece un sistema de producción que promueve un consumo más sostenible, menos contaminante, y que aprovecha al máximo el ciclo de vida de ese bien o producto sin generar residuos. Hoy, de la mano de la CEO de Voilà, Laura Gispert, abordamos el caso de estudio de un producto totalmente innovador: los primeros cubiertos comestibles.
En Voilà BIO, los cubiertos son literalmente eso, apetecibles y digeribles, a la vez que un ejemplo de economía circular y compromiso social. La empresa barcelonesa fundada en 2020 por la diseñadora Laura Gispert ha desarrollado un portafolio de utensilios (removedores, cucharas y tenedores) idóneos para acompañar cualquier tipo de ensalada, frutas, helados, café…. con el añadido de que el comensal también se los come.”.
“Desde el principio queríamos que fuese un producto apto para todo el mundo, y que se pudiera consumir incluso siendo celiaco,vegano, o intolerante a la lactosa. Además, no tiene alérgenos azúcares añadidos”, explica la responsable del emprendimiento.
A través de esta iniciativa, los impulsores de Voilà personifican en sus productos el principio de que el mejor producto es aquel que no contamina y no genera desechos “nuestros cubiertos se biodegradan como una galleta, al final es un producto completamente orgánico, y si no te lo comes se deshace en pocos días”, aclara Laura Gispert.
Una startup sostenible que ha tenido el acierto de despertar en el consumidor las ganas y el deseo de consumir ese cubierto como lo hace con la comida. “Nuestro reto es haber conseguido un producto que todo el mundo quiera comer y que aporte ese efecto ¡wow!
Que la sostenibilidad no sea lo único que nos impulse a usarlo sino también el valor añadido de ese ‘dos en uno’ en el mismo producto”.
Removedor de café: ni plástico, ni madera.
“El producto de Voilà que está teniendo más éxito es el removedor de café”, responde la CEO de la startup. “Es como la galleta de cortesía, pero además cumple con la función de poder remover el café, y de suplir al tradicional palito de madera”, otro componente de economía circular en la medida que prescinde de un material de la naturaleza extinguible como es la madera.
En segundo lugar, se encuentra la cuchara para helado que también tiene un gran mercado potencial, porque en el contexto de heladerías también se ve claramente, que es como la galletita que acompaña al helado. “Por último, el tenedor sirve para todo lo que es fruta cortada, o platos que ya vienen preparados, también nos lo piden mucho”, añade la directiva.
Negocio B2B
La marca se ha adentrado en el mercado focalizándose en el modelo B2B, que potenciará a su vez el conocimiento del producto en el consumidor final. Lo ha hecho de la mano de las cadenas de restaurantes, hostelería, y hasta con centros de ocio. “Nosotros ofrecemos otro plus para las cafeterías, cadenas de restaurantes, y franquicias, que es customizar el producto. De esta manera, las marcas lo pueden integrar como un sello de identidad y de diferenciación”.
Compromiso social
“Hemos protegido y patentado industrialmente los cubiertos de Volià con un desarrollo y proceso productivo propio, fabricándolos en centros que pensamos replicar alrededor del mundo. Empezamos a producir en España, en una fábrica que nos permitió desarrollar mucho I+D en la etapa inicial del producto, y poco a poco hemos ido profesionalizándolo”.
Recientemente, la compañía se ha aliado con el Grupo ENVERA para reforzar la provisión de algunas líneas de sus productos. “Trabajamos con un proveedor que tiene empleados con discapacidad, con el cometido de envasar los productos que nos piden. Nosotros envasamos a granel y todo lo que son envases que se salen de la línea más estándar de la fábrica, pero que nos piden ad hoc, a medida, para distintos clientes, lo trabajamos con este proveedor que quisimos expresamente que tuviera este componente social”.
Stop a los plásticos
Cuando Voilà empezó a desarrollar el producto, coincidió con que la prohibición del plástico de un solo uso en toda la UE (los plásticos que eran hasta entonces la base de los cubiertos desechables tan corrientes en el mercado). “Nos pusimos manos a la obra para poderlo industrializar, tener una gran capacidad de producción a un precio competitivo y abastecer al gran mercado, que sabemos que lo hay, en todo el mundo”.
El surgimiento de los primeros competidores, ha favorecido la aparición y primera consolidación de los cubiertos comestibles que está despertando a su vez el interés de los inversores. Con esta primera ronda de inversión y las ayudas iniciales de los fondos públicos ENISA, Voilà pretende expandirse “y hacer crecer las cuentas que tenemos ya en España, para salir a vender a otros países donde sabemos que están más concienciados con todo lo que el tema de la sostenibilidad”.
Mentores de experiencia probada
Laura Gispert no ha estado sola en su cometido de apostar por un producto innovador. Además de contar con el impulso de Barcelona Activa, que junto a Mercabarna lanzaron el programa Innofood al que la emprendedora presentó su proyecto y en el que ganó el primer premio, la empresa ha contado con el apoyo de RedMentora.
Una probada red de acompañamiento a emprendedores, que trabaja por toda España, y que asignó a Voilà el mentor Silvio Elías, presidente de VERITAS, la cadena de productos ecológicos. Más propio sería decir que “le seleccionamos nosotros, porque ellos fueron pioneros en empezar a distribuir producto ecológico hace veinte años, cuando todavía no se llevaba eso en el mercado español. Silvio –prosigue Laura Gispert- tuvo la resiliencia de estar ahí, y seguir cuando todavía era un mercado muy verde, nada maduro. Y es admirable estar asesorados por una persona y su equipo, que han transitado antes por lo mismo que ahora pretendemos nosotros, y con éxito, porque veinte años más tarde tienen una marca muy bien posicionada en el mercado”.
