Normalmente los emprendedores, por urgencia de capital, suelen equivocarse a la hora de escoger a sus socios o “compañeros de viaje”. Existe lo que se llama “precio de oportunidad”, pero no se habla mucho de las “inversiones caras” producidas por malos socios o compañeros de viaje inadecuados. Sí, es así, existe el “dinero caro” y el “dinero barato”. Desgraciadamente, a falta de capital en etapas tempranas en las startups, existe mucho “socio o inversor” potencial que, desgraciadamente, no está capacitado para ser socio, y menos para ser inversor.
Cuando una persona invierte en un proyecto invierte en una idea pero, ante todo, invierte en una persona. A esa persona se le ha de respetar, se le ha de dejar trabajar y, sobre todo, ayudar y apoyar. Vemos cientos de casos de personas sin formación, sin capacitación, que no solamente no dejan ejecutar sino que se dedican a aleccionar, causando en el emprendedor desánimo o tiempo mal invertido. Un buen inversor o socio / mentor aconseja, no alecciona.
«Cuando una persona invierte en un proyecto invierte en una idea pero, ante todo, invierte en una persona»
Para poder aconsejar has de tener conocimiento y experiencia, además de saber transmitir esos consejos de manera constructiva. Al final, como en todas las relaciones en la vida, mismo consejo: lo tóxico lejos. Las cosas tienen que fluir. Una inversión en una startup es oportunidad vs capital, no es un favor vs tiranía o toxicidad, no nos engañemos. El nivel es el mismo, no está uno por encima de otro. Mismo nivel, oportunidad, humildad y generosidad.
Mis consejos: Huye de lo tóxico, Huye de “tolosas” (todo lo saben), huye de aleccionamientos (los consejos son mejores), huye de Yoismos y egoísmos inmaduros, huye de los que te echen en cara la inversión y no te apoyen, huye de gente sin formación sin humildad (que piensa que lo sabe todo) y huye de quien no te potencie.
«Al final, como en todas las relaciones en la vida, mismo consejo: lo tóxico lejos»
En definitiva, huye del dinero caro
Todos somos personas, con cualidades y defectos, pero somos personas. Las personas merecen respeto, merecemos oportunidades y, aunque todos tengamos defectos, las personas que te acompañen te han de potenciar y acompañarte al éxito. Es muy importante escoger a tus compañeros de viaje a nivel societario, a tus compañeros de equipo. Al final, tu éxito dependerá de ello y, sobre todo, tu felicidad. Vuela y que vuelen contigo.
«Las personas merecen respeto, merecemos oportunidades y, aunque todos tengamos defectos, las personas que te acompañen te han de potenciar y acompañarte al éxito»